Las cosas cambian, y las vidas también. Todo empieza con una maravillosa vida fácil, aunque con sus inconvenientes del día a día, pero a pesar de todo, seguimos adelante. Hacemos planes, tanto de presente como de futuro. Creamos nuestras propias utopías y soñamos, soñamos mucho. Soñamos con príncipes azules y con castillos de princesas. Soñamos con vidas fáciles, en pisos bonitos, las mejores fiestas e independencia a los 18. Soñamos con viajes. Soñamos. Soñamos demasiado tal vez.
Pasan los años y cambian las situaciones. Distintas rutinas, aumentan los compromisos y las obligaciones, y disminuye el tiempo. Las apariencias pueden engañar, las cosas no suelen ser como parecen. Aparecen problemillas, problemas..pero a pesar de todo, aquello que permanece siempre, es lo que más vale la pena, lo verdaderamente importante.
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